El plástico, omnipresente en nuestras vidas diarias durante años, también se ha vuelto ubicuo en nuestro entorno. Podemos ver botellas, bolsas, y otros objetos de plástico llegando a nuestras costas y flotando en nuestros ríos, lagos y arroyos. Y eso es sólo el plástico que se puede ver.
El plástico está diseñado para durar para siempre, y así lo hace. Sin embargo, el 33% de todo el plástico se utiliza una sola vez y se tira. Pero no se biodegrada, sino que se descompone en pedazos cada vez más pequeños y eso provoca que los productos químicos tóxicos que se filtran del plástico se introduzcan en nuestro medio ambiente, en nuestra cadena alimentaria y, en última instancia, en nosotros.
Por ello, reducir los plásticos de un solo uso es uno de los mayores desafíos ambientales de nuestro tiempo. Puede que parezca una tarea enorme, pero hay pequeñas cosas que puedes hacer para reducir el uso de plástico, ya que incluso las acciones más pequeñas se suman con el tiempo y tienen un gran impacto.
Sacar los residuos de plástico del medio ambiente es una forma de ayudar, otra es usar menos plástico. Reemplaza artículos como pajitas, vasos y bolsas con opciones reutilizables. Usa tu propia taza de viaje, vaso o termo cuando tomes una bebida o un café. Incluso los vasos de papel para refrescos o café están forrados por dentro con resina de plástico, así que evita usarlos.
En lugar de cubiertos de plástico, usa cubiertos biodegradables o reutilizables. Algunos están hechos de bambú que puedes lavar y también puedes encontrar algunos hechos de materiales biodegradables que puedes tirar o compostar.
Uno de los pasos más sencillos para reducir los residuos de plástico es llevar tus propias bolsas de la compra. Muchas tiendas ofrecen bolsas reutilizables, lo cual es una excelente manera de disminuir tu huella de plástico. Puedes usar bolsas de algodón en lugar de poliéster o nailon, que también están hechas de plástico, pero se pueden lavar.
Las bolsas reutilizables a menudo pueden contener más artículos que las bolsas de plástico, lo que te permite cargar más cosas y aprovechar mejor cada viaje de compras.
Otra forma de reducir el plástico es comprar a granel. La próxima vez que compres alimentos, evita los envases individuales o los que vienen en pequeños envases de plástico. En su lugar, compra más alimentos a granel. Muchos granos, pastas, nueces, frutas secas y dulces se pueden adquirir de esta manera, y puedes llevar tus propios envases rellenables.
Hay muchas otras formas creativas de reutilizar el plástico, como convertir envases en organizadores de artículos de oficina o hacer proyectos de manualidades. ¡Mantén la mente abierta y encuentra nuevos usos para tus envases de plástico!